Casi sin darme cuenta LaLuna va a cumplir seis años, tiempo suficiente para hacer miles de fotos, retratar a cientos de bebés, niños y padres, para desandar y corregir y encontrar mi propio camino, y para llenar libros de anécdotas entre otras muchas cosas (los malos momentos, como en los partos, se olvidan ;)).
Y casi lo mejor de tener ya una trayectoria así es que me ha permitido ver crecer a muchas familias, reencontrarme con bebés que ya son hermanitos mayores, ser testigo de nuevos embarazos y nacimientos… así que cuando una familia me llama para repetir me hace especial ilusión, por saber que la última vez quedaron contentos con mi trabajo y para ver cómo les va la vida a mis pequeños clientes.
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Las fotos que acompañan este post pertenecen al día del bautizo de Claudia, en concreto a la sesión previa de retratos de la familia en casa. Pablo acababa de nacer cuando les conocí y mirad que dos hombrecitos me encontré jajaja. ¿Qué queréis que os diga? Que el tiempo pasa volando! Me parece un lujazo que familias tan bonitas como la de Alejandra me sigan abriendo las puertas de su casa, y que queden satisfechos con el resultado es la guinda del pastel.