Durante los primeros quince días de cuarentena en casa hice un reto fotográfico. Cuando lo acabé la vida nos había cambiado, tenía un puñado de fotos nuevas de mis hijos y me rondaba un poema de Walt Whitman. Os dejo algunos versos y algunas de esas fotos…
La vida es desierto y oasis.
Nos derriba, nos lastima,
nos enseña,
nos convierte en protagonistas
de nuestra propia historia.
Aunque el viento sople en contra,
la poderosa obra continúa:
tú puedes aportar una estrofa.
No dejes nunca de soñar,
porque en sueños es libre el hombre.
No caigas en el peor de los errores:
el silencio.
La mayoría vive en un silencio espantoso.
No te resignes.