Recibir en mi estudio a una pareja con su primer bebé es algo que espero con ilusión cada vez que pasa, porque casi siempre me asegura fotos llenas de una ternura especial. Hay una mezcla de cansancio acumulado, dudas, desengaños… pero siempre ese sentimiento de admiración, de gratitud y de alegría. Ojalá yo tuviera unas fotos para recordar mi propia experiencia de esos primeros meses tan complicados y tan irrepetibles. No son semanas fáciles, pero hacer un hueco para parar el tiempo por unas horas es algo que se agradece siempre.
Gracias a Julia y a sus padres por regalarme estas fotos con tanto sentimiento.
De un tiempo a esta parte casi todas las sesiones de recién nacidos y bebés que hago son regalos de familiares o amigos a una pareja. Desde luego es una forma preciosa de dar la bienvenida a una familia que se estrena. Si queréis más información sobre tarjetas regalo o sobre este tipo de sesiones, poneos en contacto conmigo. ¡Os espero!